Fuente: http://www.iniciativalaicista.cl/

       La Asociación Internacional del Libre Pensamiento (AILP) actúa por doquier, en todos los continentes, por la separación de las Religiones y los Estados.

      La AILP fue fundada en Oslo el 10 de agosto de 2011. Su Manifiesto de fundación por la libertad de conciencia, aborda el problema de la separación de las Iglesias y los Estados en los lugares donde todavía no existe, y su defensa en donde está amenazada, puntualizando que esta es la tarea fundamental de los librepensadores del mundo.

International Association of Free Thought.

      La AILP observa que en diversos ámbitos y en todos los continentes, las religiones intentan imponer su ley y sus símbolos en el área pública. Esto constituye un atropello a la libertad de conciencia de los pueblos en los países afectados.

      Las religiones en general continúan intentando imponer sus dogmas y su presencia en los espacios públicos en todo el planeta, a todos los pueblos y naciones sin distinción. La AILP rechaza esta pretensión de las religiones institucionalizadas de extender y preservar su dominación. Los tiempos pasados y también los actuales nos muestran un murallón de sangre, de persecuciones y oscurantismo levantado por ellas en contra de la tolerancia, la libertad y el progreso.

      En España, la asociación Europa Laica, miembro de la AILP, lleva una campaña decidida contra la propuesta de la Iglesia católica de erigir 1300 cruces cristianas en las cumbres de la Sierra de Guadarrama.

      Cada año, un grupo de católicos sube a una cumbre, en el marco de una excursión que cuesta 10 euros por persona. Los fieles caminantes escalan por los senderos, cargados con una cruz, o con representaciones de la Virgen, más las banderas de España y el Vaticano. Al llegar, se sacan fotografías las que difunden en diversos medios masivos.

      Recalcamos que dos nuevos objetivos han sido agregados a las intenciones expresadas por la Iglesia católica: fomentar el compromiso y la coherencia entre los cristianos “contra la invasión islámica que se viene” y, la lucha contra “la actitud acomodaticia liberal que está invadiendo a la sociedad”. Así es como, el 9 de agosto pasado, en la cuarta edición de esa peregrinación, la cumbre de la Maliciosa (1540m), en pleno parque nacional de Guadarrama, fue “coronada” con una cruz de cuatro metros de altura.

      En Arabia Saudí, el gobierno del Rey condenó al bloguero saudí Raïf Badawi a recibir 1000 latigazos en la plaza pública, y a 10 años de encarcelamiento. Con ello se trata de mostrar públicamente, que la religión de los príncipes debe ser aplicada a la vista de todos y nadie la puede criticar. El área pública se transforma así, en un instrumento que se usa para imponer a todos la ley islámica. En dicho país se ejecutaron 12 decapitaciones en la plaza pública en 2014.

     En Estados Unidos de América, la asociación American Atheist’s, miembro de la AILP, actúa en defensa de la primera enmienda de la Constitución que estableció “un muro de separación entre las Iglesias y el Estado” (Thomas Jefferson – 3er Presidente de EE.UU.).

     Dicha asociación se opuso, ante la Suprema Corte del Estado de Nueva York, a la instalación de una gran cruz en Ground Zero, en el museo dedicado a las víctimas del 11 de setiembre de American Atheist’s calificó la decisión favorable de la Corte como “una afirmación del privilegio cristiano”. Recientemente A.A. luchó contra el uso de la Navidad como fiesta de la religión cristiana en los lugares públicos, y denunció el delito de blasfemia recurrente en ese.

Las religiones en general continúan intentando imponer sus dogmas y su presencia en los espacios públicos en todo el planeta.

      En Francia, la Federación Nacional del Librepensamiento ganó juicios contra la presencia de pesebres cristianos dentro de edificios oficiales de la República francesa. Esas victorias provocaron debates mediáticos importantes en los que opusieron el Librepensamiento a las religiones (todas unidas en defensa de la presencia de sus símbolos en la esfera pública) y a los políticos que son vasallos de ellas. Otros juicios y otras acciones están realizándose en contra de la voluntad de la Iglesia católica de marcar los lugares públicos con sus símbolos cristianos. Pero, el país de Voltaire está despertándose y el Librepensamiento está al frente de esa tarea.

     En Uruguay, la AILP trabaja con un conjunto de organizaciones sociales de manera permanente. Siendo uno de los países más laicos del continente americano, incluso del mundo, tiene consagrada en su Constitución, desde 1919, la separación de la Iglesia y del Estado, así como la libertad total de cultos. El Estado no financia ninguna actividad eclesiástica, incluida las actividades educativas, las cuales están estrictamente dentro del ámbito privado, aunque sometidas al control de los organismos de la educación pública. Las últimas encuestas de adhesión religiosa realizada por Latinbarómetro indican que un 62% de uruguayos tienen alguna religión, y entre ellos el 41% son católicos. Entretanto el 38% son agnósticos, ateos o sin religión.

      En este contexto, la iglesia católica desarrolla una estrategia de re evangelización. En apoyo a esta estrategia, el Papa Francisco nombró Cardenal al arzobispo de Montevideo Daniel Sturla.

      La acción de la AILP y de las asociaciones afines, es la defensa de la separación estricta y legal de la iglesia y el Estado, la defensa de la laicidad, la lucha por evitar el financiamiento público de la educación eclesiástica, la defensa de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo vigente y de otras intromisiones de lo confesional en el espacio público.

Acciones a destacar en los últimos tiempos:

        Se evitó a través de la movilización de las asociaciones civiles, que se derogara la Ley de Salud Sexual y Reproductiva que incluye la Interrupción Voluntaria del Embarazo a través de un referéndum. A pesar de que el sistema político mayoritariamente apoyaba la derogación, solo el 8% de la población votó por ello, recibiendo los sectores confesionales que promovieron la acción derogatoria y los sectores políticos que la apoyaron una gran derrota.

       Asimismo se logró frenar, a través de la actividad de más de 40 asociaciones de la sociedad civil, la aprobación del Nuevo Código Penal en el Parlamento uruguayo, el cual contenía artículos que hacían retroceder la legislación uruguaya en varios aspectos relativos a la igualdad de género, violencia sexual, e introducía de “contrabando” artículos que reintroducían la penalización del aborto. Se estudiará dicho proyecto del ley más detenidamente y en consulta con la sociedad civil, en el próximo período legislativo.

       Se acompañó el movimiento “Je suis Charlie” por la libertad de expresión, la democracia y contra la violencia y el terrorismo, convocándose una actividad de solidaridad civil frente a la embajada francesa en Montevideo, que contó con la presencia del Embajador galo Dr. Sylvain Itté.

      Se obligó a la recién nombrada rectora de la Universidad de Montevideo (UE) del Opus Dei, Dra. Mercedes Rovira, a renunciar a su investidura, por declarar que la homosexualidad era una “anomalía” que violaba los valores cristianos, y que los homosexuales no podían formar parte del personal de dicho establecimiento educativo. La movilización de la sociedad civil, y la correspondiente denuncia penal, por discriminación por opción sexual, penada en la jurisprudencia uruguaya, llevó a una declaración pública de la Universidad de Montevideo desvinculándose de esas opiniones, y a la renuncia de dicha jerarca.

      En Argentina, con el actual papa, se ha revivido al clericalismo. Además, el nuevo líder del estado teocrático del Vaticano ha impulsado innumerables acciones para re-evangelizar territorios latinoamericanos tras marcados avances laicistas en los últimos cinco años.

       Como reacción a la permanente intromisión de la iglesia católica en la cosa pública, la Coalición Argentina por un Estado Laico (CAEL) y una de sus organizaciones miembro la Asociación Civil Ateos Mar del Plata, ambas adherentes a la AILP, lanzaron la Campaña municipios laicos «Dra. Carmen Argibay» la cual consiste en un instructivo con argumentos jurídicos nacionales y federales para que cualquier organización laicista local pueda presentar un proyecto de ordenanza para el retiro de símbolos religiosos de los edificios públicos.

       En simultaneo con esa campaña se propuso, por medio de un proyecto de ley nacional, sustituir el feriado del 8 de diciembre, que implica celebrar un dogma de la iglesia católica, por la celebración del 10 de diciembre, en su doble rol de aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y de día insignia de la vigencia de los valores democráticos en la Argentina.

      También desde esas organizaciones se denunciaron y expusieron públicamente las exorbitantes cifras que son destinadas a la iglesia católica desde el erario público.

     Desde CAEL y Ateos Mar del Plata se realizaron debates públicos y se llamó a rechazar el nuevo Código Civil que —si bien plantea algunos avances— contiene grandes retrocesos promovidos por la jerarquía católica, a la que además le ratifican privilegios otorgados en época de dictadura.

      En Chile, veinte Centros Culturales Librepensadores, han constituido una organización llamada Asociación de Organizaciones Librepensadoras “AOL”, con el apoyo de Corporación por la Ilustración, el Laicismo y la Razón “ILAyRA”, a la cual pertenecen varias que son miembros fundadoras y muy activas en la AILP, las que han priorizado su actividad en la lucha por una buena educación especialmente para los jóvenes pues esto, además, les acercará hacia la cultura, a la ciencia y al librepensamiento, en la búsqueda de la felicidad de los seres humanos.

      En la llamada “búsqueda de la verdad” declaran que es indispensable que toda la educación sea laica, obligatoria y gratuita.

      A través de investigaciones científicas – destacan – queda muy claro que nadie puede certificar o determinar que la “creación” del universo se debe a la acción de un ser a semejanza nuestra quien, además pueda regir nuestras vidas cotidianas, como lo señalan los dogmáticos.

       Respetan la Fe de los creyentes, pero exigen que estos no intervengan en sus vidas, tampoco en la de millones de hombres y mujeres del mundo, más grave si lo hacen con asesinatos, abusos, mentiras, fuerza, aprovechamiento económico y dictaduras de todo tipo, como hasta la fecha conocemos en el mundo.

        En Quito, los Centros Culturales miembros de la AILP, dicen que en Ecuador no se han manifestado nuevas iniciativas de ocupación del espacio público con símbolos religiosos, aunque ello podría estar sucediendo sin que se note, pues como siempre se lo ha hecho se lo consideraría natural y no resultaría novedoso.

        Este es un problema que presenta especiales características y dificultades en ese país pues el simbolismo religioso se funde con la cultura e incluso con el patrimonio cultural. A esto se suma la aceptación y apoyo social del simbolismo religioso en el espacio público, por ejemplo: con motivo de la visita del Papa Wojtyla a Ecuador, se levantó una enorme cruz en el importante y central parque La Carolina, que no generó críticas o si se produjeron pasaron desapercibidas. La cruz quedó y desde entonces se conoce ese lugar como “La Cruz del Papa” y constituye referencia de convocatoria a reuniones masivas de todo tipo.

        Constitucionalmente, la enseñanza es laica en el Ecuador. Aunque, en la práctica, no existe ningún establecimiento educativo que no consienta en sus locales las figuras, los símbolos y otros objetos religiosos. El patio principal del Palacio de Justicia, está presidido por una estatua, llena de flores y adornada con incontables velas, de la Virgen María. El salón de banquetes del Palacio Presidencial está dotado de una capilla adornada con todos los accesorios de culto.

        El país está consagrado al Corazón de Jesús, Las Fuerzas Armadas tienen como patrona a la Virgen de las Mercedes y cuentan con capellanes y obispos castrenses, generalmente vinculados al Opus Dei. Los presidentes de la República inician su mandato con un Te Deum en la Catedral de Quito. Las altas autoridades del Estado asisten en sus calidades a ceremonias religiosas.

       Las autoridades eclesiásticas están presentes, en forma destacada, en las más importantes ceremonias estatales, bendicen obras, colocación de primeras piedras, etc.

       Tal vez haya cambiado algún detalle descrito pero en esencia esa situación se ha mantenido, ya que salvo don Rodrigo Borja Cevallos, todos los Presidentes han sido católicos.

       Se agrega que su realidad es distinta a la europea y norteamericana, y este es un tema particularmente delicado por sus connotaciones sociales y culturales, por lo cual se están analizando otras estrategias de acción, además de lo emprendido hasta el momento por la AILP.

En Uruguay, la AILP trabaja con un conjunto de organizaciones sociales de manera permanente.

       Organizaciones librepensadoras de Colombia, Ecuador, Panamá, México, Perú, entre otras, han hecho suyas las resoluciones tomadas en el 2° Congreso de la AILP, Mar del Plata 2011, expresando con fuerza los deseos comunes de conseguir un progreso real para la libertad y la laicidad en un respeto mutuo que sólo puede existir con la real separación institucional de la Iglesia y el Estado.

       Luchar por la libertad de los individuos con absoluto respeto a su libertad de conciencia; por la justicia y el respeto de los derechos humanos; y en consecuencia, por proteger las decisiones individuales, como la apostasía; el divorcio; la anticoncepción y la libertad de concebir o no; y el derecho a una muerte digna.

      Trabajar por el pleno reconocimiento de los derechos de la mujer y de la dignidad en la aplicación del principio de igualdad de derechos. Y en particular, combatir la violencia contra la mujer, y por el derecho de la mujer a decidir sobre su propio cuerpo.

      Fomentar la libertad de asociación, la garantía de los derechos de los trabajadores, de los ciudadanos y la sociedad toda, desafío que tenemos que cumplir para el desarrollo de una mejor vida. Una sociedad más justa y equitativa, fraterna y solidaria que permita el desarrollo pleno de las capacidades de todos los seres humanos – hombres y mujeres – para lograr el perfeccionamiento material, intelectual y espiritual de la humanidad.

        Propugnar la conservación de la naturaleza como un bien común de todos los seres humanos.

        Combatir por una educación y formación pública, laica y gratuita de los ciudadanos.

        Continuar luchando por la derogación de todos los concordatos suscritos por los diversos Estados con la iglesia católica y otras religiones; así como por la abolición de todo tipo de Estado confesional.

        También en Chile, varias organizaciones han manifestado sus posiciones de constante evolución de la vida y de la sociedad sustentando y defendido al laicismo como elemento fundamental de sus actividades y doctrinas con su concepción plena de la libertad de pensamiento, como una de sus bases soportantes que les insta a luchar desde siempre para que el Estado jamás sea objeto de oscurantismos de cualquier creencia religiosa o dogmática. Pasa a ser así, el Laicismo, garantía de respeto irrestricto de la Democracia y no persecución de las ideas.

         Por lo anterior en el Proyecto OSLO 2011 fueros fundadores de la AILP a través de varios de sus centros culturales.

         En diferentes países de América Latina se lleva adelante una desigual lucha por la legalización del aborto y el derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo.

         La principal entidad, pero no la única, que se opone en forma tenaz a despenalizar el aborto es la Iglesia Católica, la cual de manera contradictoria aboga permanentemente por el derecho de los padres a decidir sobre la educación de sus hijos, libertad que se les niega a las mujeres en tanto a decidir si desean ser madres o no.

        Chile es uno de los cinco países en América Latina y el Caribe donde no se permite el aborto bajo ninguna circunstancia, junto a El Salvador, Honduras, Nicaragua y República Dominicana. Ello, pese a que Chile es un Estado Laico con separación oficial entre la Iglesia y el Estado, consagrada en la Constitución de 1925.