GADU.ORG

En Memoria de Alfredo Corvalán (10 Ago 1935 – 24 Jul 2023)

Reseña de Francisco de Miranda

Posted on May 7, 2015

A L.·. G.·. D.·. G.·. A.·. D.·. U.·.
Libertad Igualdad Fraternidad

escuadra-y-compas-mason

Reseña de Francisco de Miranda

H.·. Oscar Figueredo
M.·.M.·.

Res.·. Log.·. Simb.·. José Martí Nº 125

 

 

           Edgar Perramón en una obra denominada “Masonería en Venezuela” publicada en la página web de la Gran Logia de Venezuela, expresa lo siguiente:

“La historia de Venezuela está estrechamente ligada a la historia misma de la Masonería. Desde antes de la Independencia, la Masonería viene jugando un papel importante en la libertad y progreso del país.

Los orígenes de la Masonería Venezolana se encuentran, casi simultáneamente, en La Guaira, en 1797, con la llegada de cuatro masones españoles, de tendencia liberal, que incorporan a varios venezolanos a la actividad masónica, y en Londres, en 1798, con el establecimiento de la Gran Reunión Americana, fundada por el Precursor Francisco de Miranda, a través de la cual –y de las Logias Lautarinas que fueron sus sucursales–, muchos venezolanos se incorporaron a la actividad masónica.”

¿Quién fue Francisco de Miranda?

       El 28 de marzo de 1750 nació en Caracas, Sebastián Francisco de Miranda y Rodríguez. Su padre fue un comerciante canario, casado con una criolla de Caracas, que ocupaban los estratos superiores de la pirámide social y económica colonial española.

Francisco de Miranda (1750 - 1816)

Francisco de Miranda (1750 – 1816)

       Cursó primaria en el Colegio Seminario de Santa Rosa y posteriormente en la universidad, que era una simple prolongación del seminario, estudió artes y filosofía, acercándose a los filósofos clásicos (Aristóteles y Santo Tomás), pero estudiando también a Locke, Newton, Descartes, Gassendi y otros pensadores europeos.

        A los 21 años se embarcó para Europa, con el fin de ingresar en la Armada española. Participó en la lucha de España contra Gran Bretaña, procurando alcanzar en su actividad militar, ascensos y condecoraciones que le fueron mayormente postergadas.

       Al tener dificultades en la Armada, se dirigió, en 1783, a los Estados Unidos. Hasta ese momento, había interpretado sus actividades como un súbdito más de la corona, pero las experiencias vividas en su propia familia le comenzaron a mostrar una realidad diferente a la imaginada. Comprendió que la lucha de los hombres de la América del Norte era más de que una simple lucha comercial contra Gran Bretaña.

        A partir de ese momento se convirtió en el Precursor de la Independencia de lo que llamó “Colombia”, que abarcaba todas las naciones hispanoamericanas de América.

        En Estados Unidos se relacionó con casi todos los fundadores de la nueva república, con quienes compartió tertulias y discusiones acerca de los fundamentos de la constitución que acababan de darse, relata Luis Alberto Lagomarsino en El Ideario de los Caballeros Orientales. Hay quienes expresan que en ese tiempo se integró en la Masonería, siendo iniciado en una Logia del Estado de Virginia.

        De 1785 a 1789 se embarcó en un largo viaje, en donde recorrió diferentes países europeos y recogió apoyo para sus proyectos, entre los que se encontraba el brindado por Catalina II la Grande, quien, se dice, dispuso que se le entregara un subsidio permanente.

Precursor de la Independencia de lo que llamó “Colombia”

Miranda en La Carraca es un lienzo pintado por Arturo Michelena en 1896 con motivo de cumplirse ochenta años de la muerte de Francisco de Miranda, acaecida el 14 de julio de 1816 en la prisión de La Carraca en España.

        Se destaca que fundó en Londres, la Gran Reunión Americana,  para agrupar en Europa y América a los revolucionarios partidarios de la independencia. Algunos historiadores aseveran que ésta no era, estrictamente, una Logia Simbólica u operativa, sino más bien un club a medio camino entre lo masónico y lo político.

          Cerca suyo, en Londres, se nuclearon hombres que dieron más tarde origen y nacimiento a numerosas logias que se extendieron por toda América. Más allá de considerar si la Gran Reunión Americana fue una Logia Masónica o un club político, lo medular es que Francisco de Miranda se vinculó en forma constante por medio de este movimiento en Europa y en América, con los revolucionarios partidarios de la independencia, manteniendo constante correspondencia con los criollos revolucionarios de América.

         La Gran Logia de Chile expresa, en su página web, en relación al rol de Francisco de Miranda, en un artículo denominado Antecedentes y Fundación, lo siguiente:

A nuestra América española la influencia de la Masonería llegó con la independencia. Las ideas del notable masón venezolano Francisco de Miranda, perteneciente a una Logia de Virginia, llevan sin lugar a duda la impronta masónica cuando considera organizar una sociedad secreta que trabajase por la independencia de la América hispana. En el año 1798, bajo la inspiración de Miranda se crea en Londres, dependiendo de la Gran Logia de Inglaterra, La Gran Reunión Americana, cuyos miembros se autodenominaban “Caballeros Racionales”, y que se preocupó de constituir sociedades o Logias que llevaron el subtítulo de «Lautaro». En estas Logias Lautaro, cuyo nombre se dice habría sugerido O’Higgins a Miranda, militaron la mayoría de los héroes de la independencia de América. La naturaleza de las Logias Lautaro en cuanto a ser sociedades propiamente masónicas, es aún tema de discusión entre los historiadores, pero sí estaban formadas por masones y tenían un objetivo político muy concreto: independizar a América de la corona española”.

2 Comments

  1. Es un importante trabajo,pero falta saber quién entregó al RH a los españoled

  2. Magistral captación de los ingleses para, con el caramelo de la independencia y otorgando prebendas al masón Miranda y sus conmilitones, hacerse con el comercio de Hispanoamérica.

Submit a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *